sábado, 9 de enero de 2010

Una tela de araña sostiene unidos dos juncos, encima de ella unas gotas del agua están depositadas.

Con el paso del tiempo, el peso del agua hace que la tela de araña se resienta y dejé de sostener a los juncos.

Las gotas de agua han desaparecido, pero la tela ya está rasgada y los juncos rotos.