miércoles, 18 de noviembre de 2009

una pluma




Una pluma que hace cabriolas en el aire dejando huella con su tinta en el papel, el contador de palabras la sostiene firmemente con sus dedos largos y delgados.

Poeta que recoges las octavillas y las sostienes entre tus brazos con tu cuerpo y las meces.

Poeta que paseas con ellas y las letras se resbalan, los pensamientos vuelan y todo flota en el aire.

Flotando en el aire, tengo una lluvia de hojas blancas.

Hojas blancas que han deslizado en sus dedos.

Hojas blancas que flotan impermeables en el río con destino al mar.

Hojas blancas quietas en la tierra para poder germinar.

Veo como navega una hoja blanca por el río.

Al otro lado del océano, una niña hindú la recoge, no sabe leer, la seca, la siente, sonríe.

La alza al cielo y el la atrapa, empieza a llover una lluvia de letras.

El poeta ajeno a todo tiene el presentimiento que algo ha empezado a nacer

martes, 10 de noviembre de 2009

el universo en un corazon


Me preguntas;


¿Cuanto me amas?


Todo el universo dentro de mi corazón, conteste

lunes, 9 de noviembre de 2009

el primer rayo de sol



Gotas redondeadas transparentes, colocadas sin ningún orden según van cayendo en el cristal.

Miro al exterior através de esas gotas, hace frío y llueve.

No siento el frío a pesar de estar desnuda y me cubre una manta del color de mi corazón .

Un segundo así más rodeada entre tus brazos, mis ojos siempre abiertos para poder ver, no quieren perderse nada.

Me miras y preguntas:

¿Qué quieres ver?

Quiero esperar a compartir contigo el primer rayo de sol

domingo, 1 de noviembre de 2009

UNO DE NOVIEMBRE


UNO DE NOVIEMBRE

Ha salido un día soleado de niebla, con aire, una buena temperatura en el ambiente, se ve con el paso del tiempo que las malezas van creciendo agrestemente

Cuantos hay este año, tres, bien, no ha habido altas, una año más hemos sobrevividos todos.

Flores., lápidas, panteones, letras blancas, plateadas, doradas, mármoles de diversos colores y distintos perfiles, sobre ellas Vírgenes, Sagrado de Corazones, Crucifijos.

El silencio reina, no hay prisas, la paz impera, te recoge ante el dolor.

Es un punto de partida, una referencia de la última vez que los dejasteis.

No hay edad, razas, credos ni clases sociales.

Esto será nuestro final y principio rodeados entre pinos.

Una vez mas la tumba de M ª Ernesta Carmona Vallespín no tiene flores, veinte años

Mi corazón sigue encogido aun no asumo la muerte de mi padre, un dolor en el tercer ojo, se me caen las lagrimas ¿Por qué seré tan sensible?

Miro escucho observo, son curiosas las lapidas pequeñas de los muertos incinerados.

Un lápida que no se el nombre por la tantas flores solo se ve; QUERERTE FUE FACIL, OLVIDARTE IMPOSIBLE.