miércoles, 19 de noviembre de 2008

EL BESO DE RODIN (PARIS)


Fui a Paris con mi marido y mis amigos, estaban cansados de ir a museos, tome la decisión de ir sola, me fui al museo de Rodin quería ver la escultura del beso.
Mirando la escultura del beso, que siempre me maravillaba, esas figuras el frío del mármol me producía una gran calidez, pensando lo que quería transmitir Rodin con ese beso.
Detrás de mí, oí una voz pronunciar mi nombre interrumpiendo mis pensamientos. Reconocí su voz grave a pesar de los años nada menos que cinco.
Cerré los ojos pensando que sería imposible que fuera él, pero me volví para comprobar quien era, en efecto, era él.
Su cara había cambiado por el paso de los años, aunque hay que reconocer que el tiempo le había favorecido.
Me quede parada y le pregunte ¿que haces aquí? y el dijo todos los sábados del primer mes desde hace cinco años vengo a ver esta escultura, quiero ver lo que tú ves en ella.
Asentí recordando lo que comentamos juntos,¿ te parece bien que veamos juntos el museo?
En ese momento no me importaba nada simplemente quería ver el museo con él.
Paseamos por el museo mientras me comenta que tenía pareja y que en los negocios todo le salía bastante bien, en cierto modo me alegraba por él y era cierto quería que fuese feliz, seguía explicando los viajes que hizo en este tiempo.
Estuvimos todo el tiempo riéndonos y divirtiéndonos, se hacía tarde era la hora de comer por lo tanto el sugirió de ir a comer, pero me dio la opción de hacer otra cosa.
Sabía lo que significaba, siempre tenía otras opciones para hacer otras cosas pero me negué mejor comemos.
Me deje llevar el eligió el restaurante, confiando en su buen gusto deje que el eligiera la comida el vino
Decidimos ir a otro museo que estaba en París y teníamos planeado, a los dos nos gusto bastante estaba cerca del restaurante
Fuimos al museo de Orsay, se acerco me paso su brazo por mi hombro note el calor de su cuerpo y me invadió una sensación de paz, como me gustó esa sensación de que me abrazara y así estuvimos en el museo
Cuando me hablaba le miraba a los ojos, eso ojos que una vez me hipnotizo, me embriagaba su voz, mi sentido del olfato quería memorizar su perfume, veía la pintura (de otra forma que no la había visto antes), como lo veía el
El tiempo paso despacio y deprisa a la vez, la gente sonreía cuando nos veían
Volvimos otra vez al museo de Rodin, en la escultura del beso, sabía que llegaba la despedida allí me dio un beso
Un beso tierno, provocador donde quería demostrar lo que podía hacer, cargado de sentimientos .Ese beso provoco en mí una ola de sensaciones contenidas en cinco años
Se aparto el dijo ya sé porque el beso de Rodin te produce calidez. Me tengo que ir.
No pude contener las lágrimas, me resbalaron por la cara y mi garganta estaba seca y le dije si.
Salió de su boca algo que no quise ni leer y se paro se acerco y me dijo esto es un regalo para ti te lo compre en el primer viaje que hice después de conocerte.
Y se marcho quería decirle que no se fuera que volviera y todo combaría pero volví a ser una cobarde y no querer correr el riesgo.
Seguí llorando pero no por el, sino por mi, por el tiempo que perdí. Abrí el regalo era un ojo azul de la suerte ese azul que a los dos nos gusta tanto.
En el saco que estaba el ojo había una tarjeta con su dirección y teléfono y decía por detrás.
Sigo deseando conocerte mejor, pequeña

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